Autoestima en niños

Autoestima en niños.

  • ¿Qué es?
  • ¿Influye en el desarrollo social y de la personalidad del niño?autoestima en niños
  • ¿Cómo puedo fomentar la autoestima de mi hijo?

En general, la autoestima se define como la valoración afectiva del concepto que tenemos sobre nosotros mismos. En los niños, el proceso de formación del autoconcepto empieza alrededor de los dos años, y a su vez, el desarrollo de la autoestima.

¿Pero por qué es importante la autoestima en niños? Pues sencillamente porque va a constituir la base desde la cual se determinarán por ejemplo, las relaciones familiares y sociales, el éxito escolar, y la salud mental en su concepto más general.

Uno de los factores más importantes que  determinan un desarrollo óptimo de la autoestima, es la actitud y pautas de crianza y educación por parte de los padres. Esto es así por la importancia que tiene la aceptación y calidad del trato que las personas más significativas dispensan al niño, y estas personas suelen ser los padres; además esta influencia es determinante en todas las etapas evolutivas, desde el nacimiento hasta la adolescencia.

A partir del comienzo de la etapa escolar, entra en juego otro factor determinante como es la relación con los iguales (amigos, compañeros de clase, etc.), y más adelante la historia personal de éxitos y fracasos.

Como padres, o en cualquier caso, como adultos significativos o educadores, podemos fomentar la autoestima en niños:

  • Mostrando nuestro afecto de forma frecuente e incondicional. Si un niño percibe que se le trata con afecto y respeto, y que se le acepta tal y como es, le resultará fácil formarse una idea positiva de sí mismo.
  • Estableciendo normas razonables y consistentes, aunque con cierta flexibilidad. Al contrario de lo que pueda parecer, un estilo educativo firme enmarcado en una relación afectuosa, da sensación de seguridad y de control al niño, pues percibe un entorno estable y predecible, que le facilita el autocontrol y la adaptación a dicho entorno.
  • Es importante también, exigir al niño ciertas responsabilidades acordes a su nivel de competencia, que le requieran cierto esfuerzo.
  • Ante conductas inapropiadas, hacer uso del razonamiento más que de la autoridad o el estatus de padres, y anteponer la retirada de privilegios al castigo.
  • Contar con la opinión de los pequeños, permitirles que se expresen. Un estilo de crianza democrático está relacionado con una alta autoestima en niños.

«El mejor medio para hacer buenos a los niños es hacerlos felices»

Oscar Wilde